Una Sociedad Matriarcal
Si bien pudieras imaginar que una sociedad conservadora y fuertemente musulmana relegaría a las mujeres a un segundo plano, en la sociedad Minangkabau las mujeres juegan un papel muy poderoso.
La cultura tradicional Minangkabau es matriarcal, es decir, las posesiones familiares y las tierras son traspasadas de madre a hija. Los hijos solo pueden heredar lo que los padres ganan en su vida. Los niños, en general, toman el nombre del clan de sus madres, así que los niños de un hombre que se casa con otro grupo étnico no son considerados Minangkabau y no comparten ninguna patria ancestral. Si un hombre se casa con una mujer Minangkabau, por lo general, al menos al principio, vivirá en la casa de la suegra.
Sin embargo, en zonas rurales el hombre aún trabaja en la tierra que posee su madre, y tiene tanta responsabilidad por los hijos de su hermana como por los suyos. En cierto sentido, él solo es un invitado en la casa de su esposa. Si el matrimonio termina debido a la muerte o, muy comúnmente por divorcio, los hijos permanecen con la familia de la abuela materna.
Estas características de la sociedad brindan a las mujeres y a los hijos una protección, pero obstaculizan matrimonios fuertes y están en tensión con las normas religiosas.
Tradicionalmente, las cosas eran aún más difíciles para el hombre soltero. Después de la pubertad, ya no tenían un lugar en casa de su madre, viviendo con otros jóvenes en un surau (un edificio cerca de la mezquita) donde él recibiría una educación cultural y religiosa hasta que tuviera la edad suficiente para salir al extranjero y buscar fortuna fuera del pueblo.
Las tradiciones están cambiando, pero los padres aún suelen enviar a sus hijos pequeños a internados religiosos y muchos jóvenes, hombres y mujeres, viajarán al extranjero para ganar dinero y así honrar a sus familias.
- Ora para que el Señor se dé a conocer a las mujeres Minangkabau en sus posiciones de influencia.